Mientras las FFAA y la PNP combaten con
deficiencias a los terroristas en el VRAE, algunos en la izquierda peruana, y
varios en la derecha bruta y achorada del Congreso, con apoyo de su prensa
amarilla y patinólogos, siguen trabajando para sus casas propias, sin tener
propuestas y siendo indiferentes ante la lucha contra el narcotráfico que
afecta a todos los peruanos...
Luego de la renuncia de dos
ministros, es necesario hacer un balance, luego del retorno a la calma
política, que no ha detenido los embates terroristas y del narcotráfico en el
Perú. Y hemos podido constatar otra vez, la necedad de derecha a izquierda, que
siguen trabajando para ellos mismos…
Algunos en los medios
opositores, sugieren que la crisis ministerial empezó cuando secuestraron a 36
trabajadores en Kiteni. Nosotros creemos que la crisis inicia cuando se dan
tres hechos que es bueno evocar. Cuando los rehenes son liberados el 14 de
abril, opositores mediáticos y políticos se enfrascan en decir que no fue por
la presión de las fuerzas combinadas de FFAA y PNP en la zona, a pesar que el
precio de la cocaína bajó en Perú, justamente por la dificultad de
distribuirla, por los operativos. Mora, Antezana, Sheput, etc, cercanos a Perú
Posible, son los primeros entrevistados, que hablan de pago por rehenes y del
fracaso de las operaciones. Luego vendría IDL-Reporteros de Gorriti, otro
cercano a Toledo, que en medio de los operativos, informa del presunto abandono
de Tamani, Vilca y Astuquillca, que éste último desmintió, narrando la forma
real de cómo sucedieron los hechos, a pesar de insistencia mediática de IDL,
Grupo El Comercio y La República. Finalmente la entrevista al terrorista
"Gabriel", que supuestamente fue una vergüenza para los efectivos,
que en la zona no pudieron encontrarlo, pero sí periodistas del Comercio, La
República y Panamericana que recurrieron al apoyo de guías para llegar a
"toparse" con dicho sujeto. Todos estos tres hechos fueron
aprovechados por opositores políticos, que hacían escarnio de cualquier suceso
posterior, como la reaparición del suboficial Astuquillca o el hallazgo del
cuerpo de Vilca por su padre, donde se le quitaba cualquier participación a las
FFAA y DINOES que se encontraban en la zona. A eso se le suma el
"descubrimiento" oportuno de helicópteros sin blindaje, chalecos
inservibles y raciones malogradas en el VRAE, que como todo lo anterior, iba
minando la moral de los efectivos, "que no hacían nada", a pesar de
la liberación de rehenes y la muerte de 8 efectivos en el campo de acción. El
último ataque e incursiones terroristas a Oxapampa y Satipo, con una nueva
víctima, o la caída de otro helicóptero en Mazamari, este último con otra
víctima más, ahondaron la crisis ministerial, con apoyo de opositores en medios
chakanos, y Antezana, para quien el helicóptero fue derribado.
Todos los aciertos minimizados
y errores maximizados por los medios y políticos opositores, iban acumulando
una percepción de derrota en Kepashiato, Kiteni y el VRAE, que lo confirma
Datum, con ese 62% de peruanos que creen que el terrorismo está ganando la
batalla. Y más allá de las responsabilidades de mandos y ministros, se puede
verificar por una enésima vez más, que existe deficiencia militar-policial, y
también comunicativa y política del gobierno y bancada Gana Perú. Si repasamos
la cantidad de entrevistas y primeras planas del último mes, podremos verificar
la nula presencia de la posición oficialista en los medios, claro, si no contamos
la presencia de Javier Diez Canseco o Carlos Tapia, que fungían de opositores
de izquierda al gobierno; o de Salomón Lerner, que planteaba propuestas desde
su posición independiente, para enrumbar lineamientos. Sea el colmo la
omnipresencia mediática de la DBA, como Rospigliosi, Chiabra, fujimoristas,
apristas, y demás, que junto a disidentes de izquierda, que en vez de debatir
leyes para presupuesto o haber hecho algo que no linde con la corrupción en el
VRAE durante sus gobiernos, aparecían en medios opositores diariamente, que
insistían en el fracaso de la operación Libertad en Kepashiato. Y luego
critican el viaje del Presidente a Asia, que autorizaron en el Congreso; o
claman porqué la censura sería el día de la madre, cuando lo planteó la junta de
portavoces AP, APRA, APGC, GP, PP y F2011.
Dejando el aspecto mediático,
pasamos al político. Mientras las operaciones en el VRAE responden a una
estrategia de llevar el Estado a la zona, ganar la confianza de las
poblaciones, hacer la lucha ideológica contra los remanentes de Sendero y
combatir la delincuencia combinada del terrorismo y el narcotráfico; en el
Congreso, muchos patinólogos se rasgaban las vestiduras por las cabezas de los
Ministros del Interior y Defensa, y algunos, de la de Valdés. Y se podía
esperar que personajes como Beingolea, Iberico, Kenyi, Lescano, o Velásquez
Quesquén, o sea, la DBA, finjan de estrategas militares, criticando al gobierno
en todas sus dimensiones. Pero escuchar al opositor Diez Canseco no sólo hacia
Ministros, sino al gobierno, creyendo como Carlos Tapia que tumbando
ministerios, debilitaban al premier, sale de toda lógica. La derecha de manera
oportunista se había subido a las críticas, para sacar réditos en desmedro del
gobierno, pero ninguna bancada o partido ha podido llevar agua para su molino.
Ni el fujimorismo, ni el toledismo que inició el embate mediático, han podido
consolidarse con este hecho. Y a pesar de las renuncias de los ministros, la
presión para la salida de Valdés de parte de sectores políticos y mediáticos de
la izquierda marginal, que se suman al toledismo, y en ciertas ocasiones, a
posiciones fujimoristas, es insuficiente ante la derecha, que quiere que todo
siga igual, por temor al retorno de los CxC de Lerner, y ante el propio
oficialismo. Vale la pena mencionar, la deslealtad de un sector de izquierda o
CxC hacia sí misma, que también habla de la coherencia con la Gran
Transformación, pero votando contra una ley del transfuguismo que los pondría
fuera del Congreso. Y los que con mezquindad se olvidan del 0.5% que tuvieron
en el 2006, sin candidatear al lado del actual Presidente y con Gana Perú. O
que pidan la cabeza de un ministro que fue candidato al Congreso por Fuerza
Social y que venía de UPP, junto a Diez Canseco que también llegó a ser
congresista por dicha agrupación en el 2001. O como Carlos Tapia, que en el
programa de Beto Ortíz, criticaba a una asesora de prensa de la PCM, a la que
conoce desde IU.
Que lecciones quedan. Primero,
atacar el problema de fondo, que es, la estrategia de como se ha ido
combatiendo al terrorismo y narcotráfico en el VRAE, y sectores colindantes
como Kepashiato y Kiteni en Cusco. Eso amerita, como anunció el gobierno, el
relevo de mandos ligados al fracaso y a la corrupción, heredados o no de
gobiernos anteriores; y actuar de forma rápida -la salida de un ministro hace
una semana, hubiera evitado el costo de dos-. Segundo, tener efectivas
estrategias comunicativas en el Estado. TV Perú y Radio Nacional todavía no se
consolidan como medios que puedan enfrentar la desinformación y manipulación de
la prensa de la derecha a nivel nacional, y mucho responde a la ratificación de
gerentes y directivos apristas, acostumbrados al "dejar hacer, dejar
pasar", como el propio Presidente denunció que no pasaría en su gobierno,
al menos, en el VRAE. Eso, sumado a la difusión de fotos de su footing en Japón
mientras se combatía en Perú, fue inoportuno. Finalmente, hacer política real
para ganar percepción en la población para el apoyo a medidas positivas de
gobierno. El cargamontón de los medios y los políticos opositores, de la DBA y
la SIR (supuesta izquierda revolucionaria) nos ha evocado la oposición
destructiva y unificada de derecha e izquierda contra los gobiernos de Allende,
Velasco, García y Fujimori, con consecuencias diferentes, a la que no
quisiéramos llegar. El aprovechamiento de la crisis ministerial, por mineros
informales en el sur es un ejemplo. Para evitar eso, es mejor politizar ahora
la bancada, el partido y la población, para respaldar posiciones coherentes y
no seguir siendo manipulados por necios. El oficialismo ejecutivo y legislativo
debe pues estar a la altura del Presidente, que en Japón lograba atraer
inversión, y en Corea iniciaba la negociación de compra de aviones militares
para el VRAE…
René Galarreta
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